Orgullosa de ser mujer.

8 de marzo. Dia de la Mujer.
Dia de las altas, de las bajas, de las rubias, de las morenas, de las pelirrojas, de las madres, de las hijas, de las abuelas, de las que estudian, de las que trabajan, de las casadas, de las solteras, de las divorciadas, de las guapas, de las no tan guapas, de las gordas, de las delgadas, de las que nacieron hombres y se sienten mujeres, de las que nacimos mujeres y estamos orgullosas, de las que tienen ojos claros, de las que los tienen oscuros, de las independentistas, de las nacionalistas, de las cosmopolitas, de las de aquí, de las de allá, de las que viven en la luna, de las lesbianas, de las heterosexuales, de las bisexuales, de las que estan enamoradas, de las que no creen en el amor, de las presas, de la libres, de las liberales, de las que sufren en silencio, de las que no se callan, de las pijas, de las punks, de las rockers, de las casual, de las hippies, de TODAS por el simple y mero hecho de ser mujeres.

He de decir que de todo el año la fecha que más simboliza para mi es el dia 8 de marzo, el dia de la mujer, y no porque eso signifique que queda un mes para mi cumpleaños, sino porque me siento mujer en el mundo y me gusta demostrar dia a dia que yo puedo, que no tengo que depender de ningún hombre, que soy autosuficiente y que valgo lo mismo que cualquier persona. Hay algo que me gustaría que ocurriera y es que las mujeres no sufrieran en silencio ni las hemorroides, que nos unieramos y denunciaramos las irregularidades...

Qué una mujer nunca vuelva a llorar porque su marido le ha pegado, que una mujer nunca sea infravalorada por su trabajo, que una mujer nunca sea discriminada, que una mujer nunca luche y no consiga nada, que una mujer nunca pierda su puesto de trabajo por el hecho de qudarse embarazada, que una mujer nunca sea tratada como un objeto, que una mujer nunca pierda la libertad, que una mujer sea tratada como lo que es, una persona con sus derechos y deberes, con sus virtudes y defectos.

Qué no os engañen, una mujer vale lo mismo que un hombre, ¡lo mires por dónde lo mires!